Tàpies se inició en el mundo del arte en la década de 1940 y fue influenciado por los movimientos del surrealismo y el dadaísmo. Con el tiempo, su obra evolucionó hacia el arte abstracto y su estilo se caracterizó por la utilización de materiales no convencionales, como arena, tierra y otros objetos encontrados, que incorporaba en sus pinturas y esculturas.