Uno de los artistas más inquietos, que permanece en incesante búsqueda Investiga, hurga, inventa.

Trabaja óleo, grabado, dibujo, escultura. Posee un raro espíritu autocrítico derivado del estudio y la reflexión, de la observación y la cultura, de la sensibilidad y el deslumbramiento por el trabajo de los grandes maestros contemporáneos. Fernando Correa Arrazola en el desaparecido suplemento cultural El Búho solía ilustrar distintos textos: del cuento y la poesía al ensayo y la crítica.